El líder primero es líder de sí mismo, antes de comenzar a liderar a otros.
“Quien vence a los otros, es fuerte.
quien
se vence a sí mismo, es poderoso”.
Tal como lo señaló alguna vez John Maxwell: “Los líderes son efectivos por lo que son interiormente; por las cualidades que los hacen personas”. Para llegar al más alto nivel de liderazgo, las personas tienen que desarrollar esos rasgos interiormente.
El crecimiento del Líder es entonces de adentro hacia afuera, debe comenzar por sí mismo, por un dominio profundo de sus emociones y un entendimiento claro de sus capacidades, así como el reconocimiento sincero de sus limitaciones, lo cual, lejos de volverlo débil, le da una fuerza interior, una autoconfianza en lo que es y lo que tiene, que se refleja claramente hacia afuera y se manifiesta en su relación con los demás, dándole credibilidad y generando confianza en los que le rodean.
Debido a que se encontraba inscrita en la entrada del tempo del dios Apolo, en Delfos, es interpretada como el saludo que el dios dirigía a los visitantes de su templo, deseándoles sabiduría.
Importancia del autoconocimiento para el ser humano.
Conocerse a sí mismo supone el camino del perfeccionamiento, de hacerse mejor y adquirir conocimiento sobre la propia naturaleza y limitaciones, pues no podemos desarrollar nuestra naturaleza si no sabemos cuál es. De este modo, el autoconocimiento es un paso previo para la asunción de cualquier tarea o labor de importancia que conduzca a la gloria o a la sabiduría.
“Conócete a ti mismo”, entonces, es la obligación de cada individuo: comprenderse, aceptarse, estudiar la propia alma, que es el verdadero objeto de conocimiento de una persona, pues solo así el individuo podrá orientar su propia vida y sus acciones de acuerdo con sus propósitos e intereses.
Considera el autoconocimiento como un paso fundamental para acceder al conocimiento, a la verdad de las cosas, para alcanzar en la sabiduría el nivel de lo divino, lo profético y lo oracular.
“Su primer deber como líder es encargarse de su propia energía, y luego, ayudar a orquestar la de los demás”.
Reconocimiento y uso de las emociones
Los afectos y las emociones hacen parte de la naturaleza del ser humano, están presentes desde las primeras interacciones que hacemos con los otros y con la realidad, se nos presentan en todos los matices y formas, por lo tanto, no se pueden clasificar como positivas o negativas. Una de las competencias más importantes y básicas con las que un líder debe contar es la del autoconocimiento, cuando un líder se conoce en sus emociones produce algo que se llama autoconocimiento.
El autoconocimiento no es producto de una prueba rápida, de un taller o curso, o de una comprensión repentina de su condición actual, requiere tiempo, experiencias, análisis y especialmente reflexión.
Las personas comprometidas buscan hacer un excelente trabajo y quieren ser capaces de corregir problemas sin tener que atravesar por un largo proceso.
El miedo, aun así, es una emoción básica y primaria, ya que se encuentra en todas las culturas y sentirla trae grandes consecuencias sobre el organismo. Es una emoción desagradable, ya que nos hace sentir mal (aunque no negativa, ya que sentir emociones siempre es positivo, sean cuales sean). También es una emoción pasiva, ya que trata de retirarnos de lo que ocurre. Cuando sentimos miedo, nos lleva a sentirnos también indefensos. Lo que ocurre cuando sentimos miedo, es que nos retiramos.
Rubén Camacho
El miedo sirve para sobrevivir, es un mecanismo adaptativo a un entorno que, en ocasiones, nos da motivos para temerlo. Aquello para lo cual sirve el miedo tiene que ver con nuestra capacidad para reaccionar rápidamente ante situaciones peligrosas, ya que gracias a él nos retiramos cuando existe una amenaza. Esta amenaza puede ser para nuestra vida, o para nuestra autoestima, nuestra seguridad (según nuestras creencias sobre lo que es seguro o no), nuestro autoconcepto. (Rubén Camacho).
Sentir emociones es positivo, siempre es positivo sentir cualquier emoción, ya que tienen algún tipo de utilidad y nosotros debemos sentir nuestras emociones con libertad en lugar de reprimirlas o tratar de controlarlas. El problema, con cualquier emoción, es cuando nuestras creencias e interpretaciones hacen que sintamos miedo de forma disfuncional, es decir, lo que ocurre a consecuencia de sentir ese miedo es aún peor que lo que ocurriría si no lo sintiéramos. Ejemplo: muchas veces no hacemos lo que deseamos y es realmente. El miedo entonces es un Instinto primario de supervivencia, se siente miedo cuando se cree que nada va a salir bien. El miedo provoca tres respuestas:
imagen: pexels.com
Salir corriendo
Salir corriendo
Salir corriendo
la pregunta que se deben hacer las personas es si ¿todas estas actitudes frente al miedo son útiles.?
El
miedo
se
puede
racionalizar,
cuando
se
siente
la
reflexión
es
pensar
en
lo
siguiente:
“gracias
por
avisarme
de
la
importancia
de
esta
situación
de
ahora
en
adelante
yo
me
ocupo”.
Cesar
Piqueras.2015
“El
miedo
lo
sentimos
como
unas
ganas
de
no
estar
allí,
como
una
falta
de
solidez
en
las
piernas,
un
cosquilleo
en
varias
partes
del
cuerpo,
que
nos
indica
que
algo
va
a
salir
mal.”
Cesar
Piqueras
2015
La rabia es una emoción que altera, que experimentamos con gran intensidad y que apaga a su vez nuestro enfoque más racional. Puede a su vez generarnos múltiples sensaciones somáticas, como un bloqueo en el estómago o un nudo en la garganta. A su vez, si hay algo que suele definir a este estado es la dificultad para poder manejarlo y reducir su efecto. En realidad, cuando sentimos rabia algo está ocurriendo en nuestro sistema nervioso, en nuestra sangre y, por tanto, en todo nuestro cuerpo. Con esta emoción se remueven nuestras hormonas y neurotransmisores, movilizándonos para la acción. Sin embargo, antes de derivar en una conducta que podamos lamentar, lo mejor es tomar aire y comprender mejor qué quiere decirnos este estado.
Psicóloga Dolores Rizo.
A exteriorizarla porque convierte a nuestro interior en una especie de olla a presión. Cuando no abrimos una canal para que se evapore puede causarnos mucho daño, contaminando al resto de emociones, pensamientos y conductas que generemos a partir de ese momento. La rabia es una emoción que se nos escapa, que quiere salir y por eso, en ocasiones, sentimos que no podemos controlarla. Con frecuencia, nace motivada por alguien, que hace o dice algo que nos molesta.
En muchas ocasiones, exteriorizaremos la rabia contra esa persona que provocó el desencadenante de esta emoción, comportándonos de forma, impulsiva y sin control sobre nuestras palabras y nuestros actos. Sin embargo, esto no soluciona lo que realmente lo originó, causando conflictos y daños, de los que probablemente nos arrepintamos después.
Psicóloga Dolores Rizo.
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Es necesario aprender a resolverla y gestionarla, para que no nos destruya.
De dónde viene
¿Porqué la sentimos?
Descubrir su motivo
Solo cuando conozcamos la profundidad de la emoción podremos sanarla, desterrándola de nuestro interior.
No olvides buscar el
origen de la rabia,
aprendiendo de lo
que esta tiene que
enseñarte. Aprender
con tu emoción es
una forma de crecer.
Saber gestionarla es
expresarla sin
dañarte a ti ni a
nadie y transformar
la rabia en
aprendizaje es
sanarte a ti mismo
desde tus huellas
internas más
profundas.
Cada
día estaremos
aprendiendo, si
dedicamos un tiempo
a observar y
reconocer nuestras
emociones. Es
importante aprender
a gestionarlas,
tanto como aprender
de ellas, de su
origen y su motivo,
para que no vuelvan
a dañarnos ni a
causarnos malestar.
Psicóloga Dolores Rizo.
Esta emoción es también conocida como repulsión o asco, es una emoción que está estrictamente ligada a lo fisiológico pues cuando se hace presente se activan reacciones corporales cuando se trata de algo que no es agradable al sentido del gusto. Pongamos un ejemplo, cuando nos ofrecen algo que no es agradable a la vista o que ya hemos experimentado una experiencia “non grata” se activa el sentido de gusto en rechazo y corporalmente se manifiestan movimientos musculares y malestares en el área del aparato digestivo llegando a ocasionar la expulsión de lo que haya en proceso de digestión o se haya acabado de ingerir.
Victor Ortiz 2017.
es decir, ante alguna situación que no nos ocasiona un estado de tranquilidad o satisfacción se presenta como vía de escape, rechazo, repulsión que aun y cuando verbalmente se afirme que todo esta bien, el cuerpo dice lo contrario pues se dan señales que podemos considerar universales, ya que en cualquier idioma o país se hace presente de igual manera. Viendo esta emoción de manera más profunda descubrimos que a pesar de ser considerada como limitativa y/o negativa, nos protege de la siguiente manera:
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Generando una respuesta de escape cuando sea necesario hacerlo.
Evitando poner en riesgo la salud y el bienestar.
Acrecentando acciones que vean por el cuidado personal y alimenticio.
Por otro lado, el asco ha demostrado ser una emoción que ha tenido la cualidad de ampliarse debido a influencias sociales y culturales. Es decir, puede generarse producto de la influencia que hemos recibido de los demás.
Victor Ortiz 2017.
Podemos sentir
alegría cuando
alcanzamos una meta,
vivimos una
experiencia
enriquecedora y
estética o
conseguimos atenuar
un malestar que
sentíamos. En
general la alegría
forma parte de las
emociones y
sensaciones
relacionadas con un
estado de bienestar
interior; felicidad,
satisfacción,
júbilo, éxtasis,
dicha,
etc.
Muchos dicen
que la función
principal de la
alegría es asegurar
la existencia de la
especie humana, sea
como sea, también
nos ayuda a ser más
creativos,
solidarios y
proactivos, es decir
crea lazos entre los
seres.
La alegría es una emoción básica y, al igual que el resto de las emociones, posee una función adaptativa. Nos invita a sonreír, a curiosear y a explorar nuestro entorno. Estar contentos nos produce una sensación de expansión en el pecho. Así, es posible que la propia activación fisiológica asociada refuerce la sensación de estar sonriendo y compartiendo la alegría con los demás. En esta emoción a nivel corporal intervienen músculos concretos que de forma automática se activan cuando estamos contentos. La alegría favorece el equilibrio entre mente y cuerpo y nos permite recuperarnos del estrés de nuestra vida diaria. Es una emoción expansiva que nos empuja a elevar el tono de voz, además de hacernos sentir físicamente más ligeros.
Adriana Reyes Zendrera.
Esta emoción se manifiesta por todo el cuerpo, pero especialmente en la zona de la cara, con la apertura de los ojos y de la boca, dibujando una sonrisa que puede llegar a ser carcajada. También se expanden los músculos del pecho, la garganta y las cuerdas vocales, cambios que potencian nuestro bienestar.
Los investigadores Ekman y Friesen distinguen 3 tipos de alegría diferentes. La alegría auténtica o sentida, que surge de forma natural y espontánea; la falsa alegría, donde no se corresponde la expresión con el sentimiento; y, finalmente, la alegría cínica, donde se manipula la expresión de alegría para tapar otra emoción como puede ser la tristeza, el miedo o el enfado.
imagen: pexels.com
Mantiene el equilibrio y el bienestar interno: el bienestar psicológico puede estar relacionado con emociones de alegría y sentimientos de felicidad.
Ocurre espontáneamente: no es un sentimiento forzado ni planificado, sino que surge de manera natural y no controlada.
Empuja a querer compartir con los demás y a la cohesión social: es un punto de unión entre las personas, ayudando a crear nuevas relaciones y fomentando la unión social.
Proporciona paz interna: aumenta la autoestima y la autoconfianza de cada uno fomentando sentimientos y pensamientos positivos.
Es una energía que está en movimiento: si la energía está estancada no es posible que sintamos ninguna emoción placentera, por tanto, la auténtica alegría viene y se va dando paso a otras emociones que necesitan ser expresadas (miedo, enfado, tristeza, tranquilidad.).
Permite emprender nuevos proyectos: facilita la energía para encaminarnos hacia nuestros objetivos.
Permite entrar en contacto con emociones placenteras: a menudo gastamos más tiempo quejándonos de lo que no tenemos, en vez de valorar lo que nos da la vida.
Tomado de Adriana Reyes Zendrera
El amor es probablemente la principal fuente de sentimientos agradables e intensos, al mismo tiempo nos hace movilizar muchas acciones y energías. Tiene unos orígenes evolutivos, y muchos teóricos creen que el amor se basa en el antiguo sistema de circuitos desarrollado para asegurar que los mamíferos se reproduzcan y cuiden de su prole.
Fischer, Shaver y Carnochan (1990), distinguen dos clases de amor: amor apasionado (enamoramiento) y amor compañero (cariño).
Sternberg (1988), no suelen darse formas puras de amor, sino combinaciones de tres elementos:
Intimidad, es el sentimiento de cercanía, unión y afecto hacia la otra persona.
Pasión: Estado de excitación mental y física. Verdadera vehemencia por la otra persona.
Compromiso: Relación de compañerismo sin intimidad ni pasión.
Se ha identificado
una hormona, la
oxitocina, que
parece promover los
vínculos afectuosos,
cercanos e íntimos y
conductas sexuales y
reproductivas.
Bloch,
y otros argumentan
que el amor
apasionado
(retoricismo) y el
amor de compañero
(ternura), están
asociados a
distintos patrones
de respiración y
sonidos:
imagen: pexels.com
Eroticismo:
Patrón uniforme de respiración que incrementa en frecuencia y amplitud dependiendo de la intensidad del compromiso emocional, la inspiración es por la boca, los músculos están relajados y los ojos semicerrados.
Ternura:
El patrón de respiración es de baja frecuencia con ritmo uniforme y regular, la boca está semicerrada, labios relajados con leve sonrisa, músculos y ojos abiertos y relajados, la cabeza levemente inclinada a un lado.
Tomado de: Psicocode es un blog especializado en Psicología y Desarrollo Personal.
Es por esta emoción que creamos nuestros vínculos afectivos, creados a lo largo de toda la historia y desarrollo existencial, también gracias a esta emoción elegimos nuestra pareja y construimos relaciones de amigos y familia.
3 aspectos que un
líder Frisby debe de
cuidar al momento de
expresar sus
emociones.
Tener
presente que luego
que se escuche el
grupo el coordinador
del tema, da la
conceptualización
que se tiene en la
primera parte de la
guía.
3 aspectos que un líder Frisby debe fortalecer en el manejo de sus emociones.
Tener presente que luego que se escuche el grupo el coordinador del tema, da la conceptualización que se tiene en la primera parte de la guía.
La guía de preguntas para el trabajo en grupo puede ser: Se entrega a cada grupo una ficha de cartulina de color azul, amarillo o verde, una ficha por grupo. Se proyecta el video de intensamente.
https://www.youtube.com/watch?v=8j23IRUucKM.
Amarillo:
A partir de lo observado en el video cuáles son las emociones con las que más se identifican en sus interacciones cotidianas
Verde:
Cuáles son las emociones que en la relación con el equipo se presentan con más frecuencia y te generan obstáculos.
Azul:
Dos recomendaciones a los compañeros lideres para tener presente en el manejo de las emociones en relación con los equipos de trabajo.
Bibliografía
Cibergrafía
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